EL ROCE DEL VIENTO

Siento.
Siento tu tacto
en el roce del viento,
en la caricia nocturna del aire tibio.
Y ahora,
que me digan que no es tu pecho
este abrazo que siento contra el mio.

Pero y qué!
qué si ellos no entienden el cómo:
cómo puedo sentirte si no estás conmigo.
son tontos que me tachan de loco
porque aquí, sobre mis brazos te noto
y vayan donde vayan los aires los sigo,
para encontrarte
donde nacen estos vendabales,
y comienzan nuestros suspiros

CUANDO TE VEO

A veces, gacho, merodeo tu esquina,
y con valentía taurina,
me arriesgo a la caza de tu chismosa vecina,
por ver, si entre las cortinas
capturo tu imagen de reina blanquecina.

TANDEM

Tu y yo hemos jugado a imaginar ser los únicos seres humanos sobre la tierra, a construir universos que se basan en la nula racionalidad que nos mueve, hemos levantado palacios donde solo se veían las ruinas de un antiguo cortijo e hicimos de las mismas un lugar solo nuestro, donde germinaran todos nuestros propósitos juntos.

Tu y yo elevamos sueños a una realidad que no existiría si no existiésemos TU Y YO. Como si el hecho de ser ambos fuese mas probable que la realidad de nuestras ilusiones...

Si ya hemos hecho lo más difícil, le debemos al mundo seguir soñando. ¿no?

RECUERDA

Yo dije "hasta aquí", y tu, que al principio te negaste a aceptarlo, acabaste por no aceptarme.

Sabes? me parece injusto no poder mirarte y sonreírte porque hayas condenado a mi persona.
Que se acabó y lo aceptaste con la condición de dejarme morir en la ignorancia más forzosamente provocada que se recuerda, y yo que solo acabé con nosotros y no contigo sueño con el día en que te pueda volver a decir lo guapa que luces, lo loca que sigues estando o lo mucho que me alegro de verte bien.

Los abrazos que son tuyos, las sonrisas, las preocupaciones, no las tendrá nadie pues son tuyas y las estaré guardando con llave hasta que decidas que las quieres. pues yo que sufro de inexistencia, no dejé en ningún momento de quererte.

LA ESPERA

Lo guardaré aquí, donde nunca se me pierda.

No suplicaré que te quedes,
porque ya no soy de ruegos.
Tan sólo dejaré las puertas abiertas,
para que te vayas,
si quieres,
porque sólo así sabré,
que si te quedas,
te quedas porque quieres de verdad.
Y porque si es así,
que me prometes que vienes,
no tardes,
que te espero toda la vida...

Teresa Carrión